Solaris de Stanislaw Lem

El hombre es la medida de todas las cosas Protagoras 

Nuestra concepción de lo extaterrestre está vinculada a la forma como nos definimos como humano, en ese sentido lo alienigena es un reflejo, una némesis de nosotros mismos, nos imaginamos estas criaturas con los más altruistas o mezquinos intereses ,como dioses o demonios, que sostienen nuestras mismas carateristicas amplificadas por su condición extraterrestre.

Ahora bien, el universo es uno de los misterios más grandes del mundo físico por su condición inabarcable, por lo cual no es imposible que pudieran albergarse diferentes clases de seres, que no solamente carezcan de apariencia humanoide, sino que en ningún sentido puedan corresponderse con algo humano, este es el caso de Solaris, un océano plasmatico, de dimensiones planetarias que puede controlar la física de su planeta, desconoce  el sentido de la singularidad y es indefinible dentro de alguna categoría humana, carece de motivaciones humanas, de sentidos equiparables a los humanos, etc. Lem plantea un extraterrestre con el que es imposible establecer contacto porque no es comprensible desde un punto de vista humano, y sin embargo hay pruebas de que es un organismo inteligente.

Pero a pesar de los infructuosos intentos humanos por establecer algún tipo de contacto, Solaris si es capaz de contactarse, no de la manera que esperan los científicos, que les permita explotar los recursos energéticos del planeta, sino de un contacto de tipo intimo en el que los astronautas se encuentran con fantasmas de su pasado. Dejando claro que el océano es capaz de internarse en la mente humana y materializar sueños, deseos y miedos íntimos.

Este es el drama que nos plantea Lem un contacto en el que los humanos quedan desnudos frente a sus propios demonios.

La trama que desarrolla Lem puede tener múltiples interpretaciones, destaco una que a mi juicio es la más cercana.

Solaris devela el conflicto entre dos polaridades pasiva y activa. La polaridad pasiva es representada por el océano de plasma de Solaris, que es indiferente a la intervención humana y carece de la noción de ultimad, sus creaciones (las simetriadas, asimetriadas y mimoides) no tienen utilidad pragmática desde el punto de vista humano, parece ensimismado en un acto creador. La polaridad activa representa por la humanidad que en su conjunto que pretende sacar provecho de la exploración espacial, la idea de contactarse con otras civilizaciones esta mediada por la utilidad de los recursos que se puedan obtener, en ese sentido su búsqueda mantiene un enfoque cientificista, centrado la necesidad de la extracción de recursos y sometimiento del contactado. Curiosamente de la misma manera nos encontramos con que los personajes del drama son los astronautas que son solo hombres y que por naturaleza se constituyen en la polaridad activa, mientras que la única mujer, que representa la polaridad pasiva, es Harey la representación humana del océano plasmatico y que además es la única que el lector conocerá, a pesar de que tenemos conocimiento de que cada uno de los científicos de la estación tiene un visitante que lo acompaña, mientras que los científicos de la estación intentan develar los secretos de la composición de los visitantes (estos fantasmas del pasado que el océano materializa) mediante experimentos, el océano intenta contactarse con el inconsciente de los científicos mediante los sueños.

Al final la imposibilidad de obtener beneficios cuantificables y el miedo que produce el océano que esta en capacidad de develar los miedos y anhelos y darle una estructura material humana, destruye la posibilidad de mantener el contacto, que al final no puede ser mediado por el antropocentrismo.